Sigo esperando la llegada del huracán Wilma. Originalmente, la tormenta tendría que haber llegado el viernes por la noche, pero ahora se prevé para el lunes a la tarde. Y eso de que "lo peor es la espera" es muy cierto. Ya debería estar acostumbrado a todo este asunto de los malditos ciclones, pero lo cierto es que uno no puede evitar ponerse nervioso y pensar siempre en lo peor mientras espera lo inevitable.
Y ya me estoy cansando del asunto.
En fin. Estuve matando el tiempo mientras mi mente divagaba todo el día. Hice lo de siempre: cine y música. Vi nuevamente "La Noche De Walpurgis" (clásico de terror español dirigida por el argentino León Klimovsky y con Paul Naschy como el legendario licántropo Waldemar Daninski) y "The Stendhal Sindrome" (la última gran película de Dario Argento), y también estuve escuchando al maestro Ennio Morricone, uno de mis compositores favoritos de soundtracks, y el nuevo Cd de Dead Soul Tribe, que recibí ayer.
No está mal para una tarde. Pero preferiría tener la certeza de que la luz no se me puede cortar en cualquier momento.
Como dato anecdótico, acaba de formarse una nueva tormenta, al este de Wilma, y como todos los nombres que el Servicio Norteamericano De Huracanes tenía previstos para este año ya fueron asignados, ahora decidieron empezar a usar letras del alfabeto griego para bautizar a las tormentas. Esta última se llama, entonces, "Tormenta Alfa", y acaba de convertir al 2005 en el año récord en lo que a ciclones respecta. Nunca antes en la historia (registrada) hubo tantas tormentas en una misma temporada. Y después dicen que el calentamiento global no existe...
Siempre y cuando "Alpha" no venga también para este lado...
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